sábado, 24 de abril de 2010

¿DEPENDE DE NOSOTROS O NO?



Muchas veces en nuestra vida nos damos cuenta que lo que sucede es producto de nuestro destino o de nuestras decisiones. Pues podríamos decir que hay momentos en la vida que nuestro destino depende de las decisiones que nosotros tomemos, y hay veces que las cosas suceden porque estaban ya establecidas.
Lo primero se ve cuando tú puedes elegir entre 2 o más opciones, por ejemplo, si alguien depende de ti, pues está a punto de caerse a muerte, tienes dos opciones: salvarla o dejarla morir. Si por ejemplo eliges la primera, la persona que estaba al borde de la muerte es común que te lo agradezca, esto traerá una serie en cadena de consecuencias; pero, si eliges la segunda, te sentirás mal, peor si era alguien que conocías, esto traerá igualmente una serie de consecuencias en cadena.
Lo segundo cuando tu propio destino no depende de ti, por ejemplo, si es que estás cruzando la calle correctamente, para evitar cualquier tipo de accidente, y sin embargo, eres atropellado por un carro; esto no dependía de ti, sino de tu destino.
A veces se puede dar que lo primero nos lleve a lo segundo. Por ejemplo, alguien tenía dos opciones: ir o no ir a una fiesta, decidió ir y en el camino a la fiesta le sucedió un accidente automovilístico, esto no dependía de él, sin embargo si hubiera decidido no ir, su destino no se habría cumplido.
En conclusión, podemos apreciar el sino de tres maneras: Decisiones, destino establecido y que lo primero te lleve a lo segundo.

1 comentario:

  1. Es cierto; muchas cosas son de nuestro dominio y otras no.Por debemos conducir nuestras vidas como un barco en la mar guiando las velas mientras los vientos son favorables e incluso cuando estos arremeten mas fuerte y dejandoa Dios las tempesades mayores.
    Buen ensayo César, como siempre que nos tienes acostumbrados.

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